headerphoto

LA EXPERIENCIA JOVEN DE EMAÚS


En el pasaje de los discípulos de Emaús (Cf Lc 24, 13- 35), se puede encontrar la experiencia de la juventud de hoy y de todos los tiempos, pues en él confluyen tres elementos esenciales, que son parte de la vida de un joven : 1) el desanimo ante las dificultades de la vida; 2) la búsqueda de sentido para la propia existencia y 3) el encuentro con una realidad superior que transforma el ser.

1) el desanimo ante las dificultades de la vida: Es necesario ver que el joven se encuentra desorientado, perplejo ante tantas contrariedades que se presentan a lo largo del camino. Una de las más grandes manifestaciones es que se puede sentir desilusionado ante tantas propuestas que se presentan y que muchas veces son falsas ilusiones, que lo hacen sentir que no ha realizado nada importante en la vida y por lo tanto empieza a buscar otro lugar, que le de una cierta seguridad y que le sirva como medio para alejar los recuerdos.

Durante el camino, el joven va encontrando personas y circunstancias que le sirven de ayuda para iluminar sus dudas y para escuchar desde lo más profundo de su ser una respuesta a sus necesidades, sobre todo la necesidad de una experiencia fuerte de sentirse amado y además capacitado para amar.

2) La búsqueda de sentido para la propia existencia: Después de instaurar un diálogo, el joven se encuentra con algo que le da luz a su vida y empieza a cuestionarse y dar posibles soluciones ante todo aquello que lo agobia y lo lleva a las esferas del sinsentido, del realizar las cosas por conveniencia o porque es necesario hacerlas para no quedar mal ante los demás.


El sentido de la existencia se convierte en la carta de navegación, sobre la cual, se apoya todo un proyecto, toda una lucha para llegar a un fin, que es la felicidad.

3) El encuentro con una realidad superior que transforma el ser. El joven se encuentra en un plano meramente natural, pero las perspectivas se abren y se empieza enfrentar al plano sobrenatural, en donde el maestro de la vida, Jesús, se le presenta, le abre los ojos y le permite tener una experiencia de su amor; invitándolo a transformar su vida, pero sin abusar nunca de su libertad y dándole la oportunidad de una renovación interior y de llenarse de Dios, tanto por la escucha de la palabra, como por su presencia en la Eucaristía.

Ante tanta generosidad por parte de Dios es imposible quedarse inmóvil, es necesario salir a anunciar a todos que vale la pena empezar un camino que lleva a descubrir el sentido de la vida y aunque en ocasiones, se presenta como algo árido, siempre tienen un buen fin, porque no se está caminando solo, ya que, el amigo de camino es aquel que puede dar una nueva vida y trasformar definitivamente la persona.

Muchos de nuestros jóvenes en Manizales se han puesto en camino con el maestro y han encontrado la solución a todas las necesidades que se van presentado. Hay muchos jóvenes que han encontrado la verdad de Jesús, de un Jesús, que no se quedo crucificado, ni en un sepulcro, sino que venció la muerte por su resurrección y ha alcanzado una nueva vida para todos los que le siguen de corazón.

Música


Abre el corazón a la Palabra de Dios